En su regreso a “La Fortaleza”, los Bravos de León salieron con el ánimo de darle una alegría a su afición, pero se toparon con unos Guerreros de Oaxaca que llegaron con la artillería encendida y terminaron imponiéndose 10 carreras a 6 en el primer juego de la serie. Aunque los locales mostraron garra y ganas de remontar, el daño estaba hecho desde temprano y la visita supo manejar la ventaja con temple bélico.

Todo empezó con un doblete de Yariel González que trajo la de la quiniela para los oaxaqueños en la parte alta del primer rollo. Pero Henry Urrutia no se quedó con los brazos cruzados y, con su noveno doblete de la temporada, empató la pizarra en ese mismo inning, encendiendo por un momento a la tribuna leonesa. Hasta ahí, la historia pintaba pareja.
Sin embargo, en la tercera entrada llegó el trancazo, Luis Barrera se voló la barda con casa llena en un tremendo Grand Slam que silenció el estadio y empujó a cuatro compañeros al plato. El zurdo Adam Wolf no encontró respuestas y tuvo que dejar la lomita antes de terminar el quinto capítulo. Su relevo, José Piña, tampoco pudo apagar el fuego y los Guerreros siguieron haciendo de las suyas.

Los Bravos, eso sí, no se fueron sin dar pelea, Carlos Castro, Urrutia y Sandber Pimentel pusieron su granito de arena para recortar distancias, y aunque la reacción parecía tomar forma, otra embestida de los Guerreros en la sexta entrada volvió a estirar la diferencia.
A pesar de dejar hombres en posición de anotar en las últimas entradas, los leoneses no lograron capitalizar. El cierre fue frustrante, con esperanza pero sin resultado.

La serie sigue este miércoles a las 7:30pm en el Estadio Domingo Santana. Collin Wiles será el encargado de intentar emparejar la serie por parte de los Bravos, mientras que Radhames Liz tomará la bola por los Guerreros.