El Estadio Domingo Santana fue testigo de una noche que los Bravos de León seguramente querrán borrar rápido del casillero. Y es que en el segundo de la serie frente a los Guerreros de Oaxaca, la tropa del Bajío simplemente no carburó, firmando una dolorosa derrota de 18 a 2 ante una ofensiva visitante que se dio vuelo desde temprano y hasta el último out.
Lo que parecía una oportunidad para seguir sumando triunfos con Miguel Tejada al mando, terminó siendo la primera mancha en el historial del dominicano como nuevo líder del dugout bravo. Por su parte, los oaxaqueños sacaron brillo a su artillería y aprovecharon cada descuido de un relevo leonés que venía de lucirse en la serie anterior. Esta vez, nada fue igual.
Todo comenzó con un doblete de Yariel Rodríguez que puso en movimiento a Luis Barrera desde las primeras de cambio. Aunque los Bravos de León respondieron con estilo gracias al séptimo jonrón de la temporada del gringo Jimmy Kerrigan, la emoción local duró poco. La visita mostró los dientes en la quinta entrada, con un cuadrangular solitario de Ricardo Valenzuela y un sencillo productor de Alexi Amarista que marcó la diferencia… y el rumbo del juego.
La ofensiva de Oaxaca no bajó el ritmo. Valenzuela volvió a aparecer en la sexta, Reynaldo Rodríguez se sumó al festín en la séptima, y en la octava vino un rally letal. Amarista —con noche de cuatro carreras impulsadas— encabezó una ofensiva que cerró con un “grand slam” de Sebastián García que dejó al público en silencio. Literalmente, les pasaron por encima.
Los Bravos intentarán reponerse este jueves cuando salten al diamante con Faustino Carrera en la lomita, buscando salvar el honor y evitar la limpia. Por los Guerreros, Jake Faria será el encargado de cerrar la serie. Las acciones comenzarán a las 7:30 de la noche, y en León todos cruzan los dedos para que esta vez, la historia sea distinta.
