En plena Sierra de Lobos, justo donde la naturaleza aún respira profundo, nueve animales dijeron “¡libres al fin!” gracias a una acción conjunta entre la Secretaría del Agua y Medio Ambiente, PROFEPA y el Zoológico de León. ¿El objetivo? Proteger lo que aún nos queda de biodiversidad en el estado y darle una segunda oportunidad a estos ejemplares que alguna vez estuvieron en peligro.
Se soltaron 1 alicante, 1 zorrillo, 2 tlacuaches, 2 zopilotes y 3 coyotes. Todos ellos pasaron primero por un proceso de rehabilitación en el centro de rescate del Zoológico de León. Edmundo Parada, gerente operativo del lugar, explicó que fueron canalizados por Protección Civil y el heroico cuerpo de Bomberos, y que no fue sino hasta que estuvieron listos, que se les dejó volver a su hábitat natural.
Cada uno de estos animales juega un papel clave en el ecosistema. Por eso, su regreso a la naturaleza no solo significa un final feliz, sino también un paso gigante para conservar la biodiversidad que hace de Guanajuato un estado único.
En los últimos años, también se han hecho liberaciones en la Cuenca de la Esperanza, Cuenca de la Soledad y Cerro del Palenque. Desde linces americanos hasta lechuzas de campanario y cacomixtles, estas especies han regresado a casa gracias a que las áreas naturales protegidas están en buen estado de conservación.
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Así que si vas por el monte y te topas con alguno de estos animalitos, nada de quererlo adoptar o espantar. Mejor repórtalo a Protección Civil, Bomberos o directamente a la PROFEPA. Porque proteger a estos ejemplares es también proteger nuestro propio futuro como sociedad.
